Han sido cinco días de peregrinación, del 28 de Marzo al 1 de Abril, organizada por la Hospitalidad de Nuestra Señora de Lourdes, de Santander. En total, doce autobuses procedentes de toda nuestra diócesis, enfermos, peregrinos, hospitalarios, sacerdotes,… y también, como no, contamos con la presencia de nuestro Obispo D. Manuel Sánchez Monge.
Tuvimos tiempo para orar, para ayudar en el traslado de los enfermos a los diferentes lugares de las celebraciones, pero también para conocer gente nueva, convivir, hacer un poquito de turismo y hasta una pequeña fiesta.
Los momentos de oración en Lourdes, son especiales, todos acabamos con la misma sensación, ya sea participando en los diferentes momentos organizados para ello, como la procesión de antorchas de la noche, la Misa Internacional, la exposición del Santísimo todas las tardes, el Viacrucis por el monte, el Viacrucis de los enfermos,… pero también son muy emotivos los momentos de oración o encuentro con la Virgen, delante de la gruta donde se apareció a Bernadette, lugar muy acogedor y de mucho silencio, que da pie al recogimiento. Este año además pudimos ganar el Jubileo, ya que Lourdes es Puerta Santa declarada por el Papa Francisco.
Pero, sin lugar a dudas, el núcleo central de esta peregrinación son los enfermos. Todo está perfectamente adaptado para facilitar los traslados y atender todas sus necesidades. Para muchos de ellos, estos, son los únicos días que pueden salir de sus domicilios y residencias, por lo tanto, todas las personas que se dedican a su cuidado como médicos, enfermeros, voluntarios (hospitalarios),…. emplean su tiempo en conseguir que sean cinco días que puedan disfrutar plenamente. La labor de servicio a los enfermos que realizan estas personas, es digno de admiración, siempre con una sonrisa y evitando que el cansancio pueda con ellos. Además, este contacto que tienen con los enfermos, lo mantienen durante el año a través que diferentes convivencias que realizan.
Es una experiencia que merece la pena vivir, y sobre todo disfrutar y sentir. Por eso, os animamos a participar el año que viene en la peregrinación a jóvenes y adultos,.. ya sea como peregrinos, enfermos, voluntarios. De verdad que es una vivencia muy bonita y que quien va, repite.
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