El pasado viernes día 19 se celebró en la misa de 19:00h de la parroquia Ntra. Sra. de la Asunción, la festividad de San José, doblemente especial, en esta ocasión, para los católicos por estar inmersa en el año dedicado al santo. La ceremonia estuvo presidida por el religioso amigoniano P. Jürgen Hoffand y concelebrada por el párroco P. Juan Carlos Rodríguez. Se dedicaron unas palabras de felicitación a todos los padres y todas las personas que llevaran el nombre del santo festejado. La homilía fue un breve recorrido por las virtudes de San José deteniéndose en una de ella, el Silencio. San José era un hombre que huía del protagonismo, aquello de "no dejes que tu mano izquierda sepa lo que hace la derecha" (S.Mt 6 -3) estaba muy presente en él. Dejó el protagonismo a Jesús y a María, quedándose en 2° plano, ayudándoles desde su mutismo. Además de que le gustaba pasar desapercibido, era su manera de centrarse en la obediencia a la voluntad de Dios, en poder cumplir con lo que el Señor le iba encomendado (a través de sus sueños) y dirigido a llevar a cabo su parte en el plan de salvación. San José nos enseña con su Silencio a vivir de cara a Dios y no a los hombres, un tanto difícil, ya que al hombre por su naturaleza le gusta alardear, ser protagonista de cualquier nimiedad. De modo que hemos de ser totalmente transparentes en nuestras acciones para que Nuestro Padre Celestial vea que nuestra verdadera intención es agradarle y servirle desde el amor, pues es lo único que nos servirá para nuestra eternidad. A la salida de misa, se repartieron entre los feligreses unas estampas con una oración de San José, editadas este año por la Diócesis de Santander.
No hay comentarios:
Publicar un comentario